El presidente Gustavo Petro afirmó este miércoles que no convocó las movilizaciones que se desarrollan en el país, las cuales —según sus palabras— fueron organizadas por “las centrales obreras y la coordinadora popular”. Sin embargo, múltiples intervenciones recientes del mandatario, tanto en el extranjero como en actos públicos, han sido interpretadas como un respaldo abierto a las protestas.
Uno de los antecedentes que ha generado controversia es un mensaje de WhatsApp que se conoció el pasado 14 de mayo, luego de que se hundiera la propuesta de consulta popular en el Senado. En el mensaje, el entonces ministro del Interior, Armando Benedetti, pregunta a Petro: “¿Quién convoca la huelga general?”, lo que ha generado especulación sobre una posible coordinación desde el Gobierno.
Ese mismo día, en una alocución desde China, el presidente dijo:
“Mal paso el que ha dado una parte del Senado de la República […] debemos contestar con la sabiduría de un pueblo decidido, que ya demostró que es mayoría […] Los convoco y las convoco […] a reunirnos en cabildo abierto en todos los municipios de Colombia”.
Días después, el 20 de mayo, durante un cabildo popular en Barranquilla, Petro volvió a dirigirse al país con un discurso de tono movilizador. Delegó simbólicamente el liderazgo de las acciones sociales en la Coordinadora Nacional Popular y afirmó que no se atacará al pueblo por manifestarse, reiterando su cercanía con las causas populares:
“Si toca ir a una huelga indefinida, el presidente no atacará al pueblo de Colombia jamás, sino que se pondrá al lado del pueblo. Y si me van a echar por ello, entonces estalla la revolución en Colombia”, expresó.
Las declaraciones han generado debate en sectores políticos y sociales sobre el papel del mandatario en la convocatoria o impulso de las movilizaciones. Mientras que el Ejecutivo insiste en que las protestas nacen desde las bases sociales, sus palabras han sido interpretadas por muchos como un llamado velado a la movilización popular frente a la negativa del Congreso a aprobar algunas de sus reformas clave.