Katerine Martínez, alias Gabriela, capturada en Florencia, Caquetá, por su presunta participación en el atentado contra el precandidato presidencial Miguel Uribe, aseguró ante la Fiscalía que fue “amenazada” para colaborar en el ataque. Según parte de su testimonio, su rol fue el de “pantalla”, actuando como distractora en el lugar del atentado.
La joven de 19 años, originaria de Soledad, Atlántico, enfrenta cargos por tentativa de homicidio agravado, porte ilegal de armas y uso de menores en delitos. Se reveló que el día del ataque coordinó el transporte del sicario y entregó el arma utilizada. La Fiscalía también investiga el origen de $1.100.000 hallados en su poder al momento de su captura.